Como una de las mejores empresas de control de plagas en Madrid, somos conscientes de que la llegada de la primavera viene acompañada por múltiples plagas de insectos y roedores. Se trata de la época en la que aprovechan para invadir nuestro jardín. ¿Cuáles son las plagas más habituales que llegan a nuestro jardín durante la primavera?
Orugas y gusanos
Una de las plagas que suelen aparecer durante esta estación es la oruga. Las orugas van comiendo las plantas poco a poco, sobre todo las hojas y el tallo. Pueden retirarse con la mano, siempre con guante, si hay pocas, pero, en caso de haber demasiadas, entonces habría que utilizar un insecticida o incluso llamar a profesionales especializados en el control de este tipo de plagas para un mejor resultado.
Por otro lado, también pueden aparecer los gusanos de suelo, que se comen también las raíces y las semillas de las plantas, sobre todo por la noche. Son muy peligrosos, ya que las plantas pueden llegar a quedarse sin fuerza y exponerse a las enfermedades sin poder protegerse adecuadamente.
Insectos
El incremento en la temperatura es uno de los principales estímulos para la llegada de los insectos al jardín. Hay que tener mucho cuidado, ya que se trata de plagas pueden ser muy difíciles de detectar, y muy perjudiciales para las plantas, ya que pueden llegar incluso a matarlas. Las plagas de insectos más habituales en esta época son el pulgón, la araña roja, la cochinilla y el taladro del geranio.
De todas ellas, quizás la del pulgón es una de las que más presencia tiene en primavera. Los pulgones se alimentan de la savia de las plantas, puesto que necesitan esta sustancia para su desarrollo.
No podemos olvidarnos de las hormigas. Por sí solas, no son preocupantes ni presentan ningún peligro para las plantas. Sin embargo, impiden que los depredadores naturales de los pulgones puedan atacarlos, como las mariquitas, por ejemplo. De esta forma, es importante saber que, si se detecta la presencia de hormigas en las plantas del jardín, en Sintra recomendamos mirar más a fondo, ya que es posible que también exista la presencia de pulgones.